El proceso hacia la Totalidad del Ser


Finalizamos este 2010 con muchas propuestas de trabajo, con nuevos desafíos y con la convicción de continuar trabajando para estar a la altura de los desafíos espirituales que el momento nos plantea.

22.1.07


Jornada de práctica y especialización”

La Escuela de Reiki Práctica Vital comunica que el viernes 2 de febrero, a partir de la hora 11.00, se llevará a cabo una jornada de práctica y especialización en la técnica Reiki.
En la oportunidad de realizará un taller cuyo propósito es el despertar del sanador interno.
Se invita a los Reikistas de todos los niveles a participar en este intercambio de experiencias.
La participación es totalmente gratuita y mayores informes se pueden recabar en Gobernador Ferreira 150, o a los teléfonos 15523706 ó 434209
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REIKI Y EL DESPERTAR DEL SANADOR INTERNO


La práctica de Reiki presupone el recorrido de un camino de transformación personal. Reiki es un método de armonización natural, de profundo contenido espiritual que, basado en principios de vida, tiene el propósito de reconectarnos con la energía universal de vida.
Esa conexión conciente, ese despertar a la posibilidad de canalizar energía es lo que provoca en nosotros una transformación a partir de la cual progresamos en el mejoramiento de nuestra calidad de vida, como también en el aporte de elementos para ayudar a los demás.

Pero, lo fundamental, es tener en claro que Reiki comienza por Uno mismo.
En general, los que se acercan al aprendizaje de la técnica lo hacen movilizados por necesidades profundas que van desde dar respuesta a sus inquietudes espirituales, como al hecho de progresar en el conocimiento de su calidad de vida, y por supuesto, buscando un método sencillo y natural que los aleje de sus dolencias físicas.
Es en ese momento cuando surge la necesidad ética de aclarar que Reiki no cura. Reiki contribuye de manera efectiva a que se manifieste el sanador que todo llevamos dentro. Es por ello que el trabajo energético que propone la técnica tiene la finalidad de que, poco apoco, vayamos recuperando nuestras capacidades de autosanación.
A través de Reiki se crean las condiciones más propicias para el logro de resultados positivos a todo proceso terapéutico.

Desde hace milenios, las tradiciones orientales y las culturas originarias de todo el planeta, vienen manifestando una visión abarcadora, holística, del ser humano. El hombre como parte de un todo energético unido a la naturaleza, a los demás seres, a toda manifestación o expresión de vida.
En la actualidad, la física cuántica da pruebas concretas de esta realidad en la que todo evento es una manifestación de energía.
La práctica de Reiki es una aceptación de esta realidad, y una toma de conciencia de la responsabilidad de contribuir activamente al proceso de la vida.

Despertar al sanador interno es, en primer lugar, prestar atención a todos los aspectos que contribuyen a nuestro buen estado de salud y bienestar. Y esto se puede lograr, tal como expresa Ángeles Arrien en su obra “Los cuatro senderos del chamán”, prestando atención a lo que tiene corazón y significado. Es decir que, partiendo de la base de que el amor es la fuerza curativa más importante de la que puedan disponer los seres humanos, la capacidad de autosanación (el sanador interno) comienza a manifestarse cuando la persona abre sus brazos al amor, al reconocimiento y la aceptación de las cosas válidas y a la gratitud.

Desde el corazón se establece el puente que comunica nuestra salud física con lo emocional y lo espiritual, toda vez que éste se manifieste como pleno, abierto, claro y fuerte.

La plenitud se expresa haciendo aquello que en verdad sentimos y poniendo todo nuestro corazón en ese cometido.
Un corazón abierto a la experiencia, sin temor al fracaso, que acepta los desafíos en vez de refugiarse en la defensiva.
Claro antes de emprender la acción, sin dudas ni confusiones.
Fuerte para defender con coraje lo que tiene sentido y manifiesta nuestra autenticidad

La práctica de Reiki nos ayuda a responder permanentemente, ante cada circunstancia de la vida a la pregunta: ¿Tengo hoy el corazón pleno, claro, abierto y fuerte?
Se convierte así en una guía que nos permite desarrollar la vida con el foco puesto en la necesidad de promover nuestra salud y a partir de allí influir positivamente sobre nuestros semejantes, o lo que es lo mismo, mantener vivo a nuestro sanador interno
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